Desde la posible filtración del faldón delantero del BMW M2 2023, los diseños de Photoshop para la nueva edición del deportivo compacto se han ido concretando cada vez más. Quizá la incógnita más apasionante por el momento tenga que ver con los faros delanteros, ya que los huecos del faldón delantero filtrado y la forma de los faros del BMW Serie 2 Coupé G42, que también se conoce oficialmente desde hace unos días, no coinciden exactamente. La solución más económica podría ser una pieza adicional más pequeña para los faros que rellenara el hueco en dirección a los riñones y, de este modo, podría aumentar considerablemente la independencia del diseño frontal, así como la diferenciación respecto al Serie 2 normal, por relativamente poco dinero. ¿Buscas una furgoneta en Málaga? Las mejores en furgonetas ocasión Málaga Crestanevada.
El modo exacto en que este detalle podría implementarse visualmente e integrarse en el diseño general sigue abierto. Así pues, en el último render de magnus.concepts vemos el nuevo frontal del M2 junto con los faros normales de la Serie 2. No obstante, el diseño nos muestra un BMW M2 G87 a la deriva y nos da una impresión de cómo podría ser la sección delantera con sus tomas de aire sorprendentemente angulosas y los riñones con montantes dobles dispuestos horizontalmente en el vehículo de 2023:
Tras la actual generación de M3 y M4, el nuevo BMW M2 2023 sería la siguiente serie de modelos M con un diseño frontal completamente independiente. La única línea clara que ha surgido hasta ahora son los travesaños transversales de los riñones; los M3 y M4 no parecen servir de modelo para la forma exterior y el tamaño de los riñones. En cualquier caso, el frontal del BMW M2 G87 con sus formas angulosas parece adoptar un enfoque relativamente pragmático que encajaría bien con la idea del deportivo compacto: No se trata principalmente de mostrar y brillar, sino directamente de placer de conducción y prestaciones asequibles.
La propulsión necesaria para una u otra deriva la proporciona el actual seis cilindros en línea biturbo S58, que también podría arañar la barrera de los 500 CV en el BMW M2 G87. Esto llevaría al M2 tan lejos de las esferas de rendimiento habituales de los deportivos compactos como el resto de la disposición técnica: mientras que los rivales se basan en arquitecturas de tracción delantera con un cuatro cilindros montado transversalmente y la correspondiente distribución de peso en la parte delantera y tienen que utilizar mucha tecnología para intentar distribuir al menos el 50 por ciento de la potencia a las ruedas traseras y dinamizar así el comportamiento, el M2 se beneficia de su arquitectura CLAR cluster, que no tiene rival en el segmento, incluyendo una distribución equilibrada del peso y la clásica tracción trasera.